En el sonido de la noche me esperan tus labios y recuentan:
Uno, dos, tres besos marinos que despiertan el agua dulce en mis venas.
La luna nos mira y los perros cantan su canción noctámbula, el traspaso de los sueños bajo la cascada etérea.
El sueño se nos apodera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario